Es el compromiso de mantenerse al lado de un amigo en todo momento, incluso cuando las cosas no son fáciles. La lealtad implica defender al otro y no abandonarlo cuando más lo necesita.  

Es la seguridad de poder contar con el otro sin temor a ser traicionado o juzgado. Se construye con el tiempo y es la base para una amistad sólida y duradera.  

Es decir la verdad con respeto, incluso cuando no es lo más fácil. Un amigo honesto actúa con transparencia y no oculta lo que piensa o siente.  

Es la capacidad de ponerse en el lugar del otro, entender sus emociones y acompañarlo sin juzgar. La empatía fortalece los vínculos y crea comprensión mutua.  

Es brindar ayuda sin esperar nada a cambio, acompañando al amigo en los momentos difíciles. Ser solidario es estar presente cuando el otro más lo necesita.  

Es el deseo de cuidar y mantener la relación con esfuerzo y constancia. Significa estar presente, cultivar la amistad y no darla por sentada.